Paraiso caribeño

Sólo hace falta un susurro para despertar al monstruo.
Hablemos de provabilidades:
-La provabilidad de que los pobres sigan siendo pobres es muy alta.
-La provabilidad de que los ricos sigan siendo ricos es altísima.
-¿Puede un pobre ser más pobre? Por supuesto.
Hace falta que ocurra una gran desgracia para que se envíen millones y millones de euros a un país que lo ha perdido todo.
Bueno, ese todo no era gran cosa, pero era todo lo que tenían.
Yo me pregunto: ¿es ahora cuando han empezado a suplicar ayuda? Yo creo que no, amigos. Creo que llevan suplicando ayuda desde ayer, desde hace un més y desde hace años. Lo penoso es que solo se les escuche cuando el daño es mayúsculo. En otros países más "desarrollados" hay terremotos igual de fuertes y no pasa nada. Puerto Príncipe se cubre por la nube de polvo que dejan los edificios trás de sí al derrumbarse. ¡Toda una ciudad! ¡Qué fuerte!
Porque no involucrarse y mirar hacia otro lado no hace que el problema desaparezca.
Y nos sorprendemos de que la gente se deprima porque este mundo no es el mundo de la película de moda. ¡Por favor!
Este mundo no puede ser de película porque las películas se terminan, tal y como alguien quiere que lo hagan. En cambio, la vida sigue día tras día. Y a menudo las decisiones sobre un hipotético curso de la misma suelen ser desacertadas.
Que Dios guarde a toda esa gente de Haiti. Y que los aviones con ayuda lleguen pronto. Y que las donaciones lleguen en su "totalidad".