
¡Se nota, se siente! ¡La primavera está presente!
Después del largo (larguíiiiisimo), oscuro y frío invierno, dá gusto levantarse por la mañana con el sol entrando exuberante por la ventana y los pajarillos canta que te canta. Los campos lucen un verde intenso y brillante y comienzan a llenarse de pequeños puntitos multicolor que crecen por doquier.
El cuerpo se despierta y se despereza como si regresara al mundo después de un sueño tortuoso y pesado, sobre un colchón de muelles puntiagudos y cojoneros, con "Don't tell me that it's over" de Amy Macdonald sonando a todo trapo en la radio.
¡Ay...la primavera! ¡The beatiful spring!
¡¡¡Eh!!! ¡¡¡A sonreír todo el mundo, eh!!!